martes, 30 de septiembre de 2008

De una vez aprovechando

Acostado me dije:
estar sedado
no se puede todos los días.


Luego ella se paro y dio un suspiro,
la maldad de la falda
comenzó a vestirse,
y luego una dentellada
de luces salió
a dar los buenos días
del cepillar de su pelo.


Ojos bañados
en la muerte roja
y nada más.


Como expandido
goce sobre su vientre,
marca de siempre
que se deja sobre su cuerpo.


Ambos se acuestan
sabiendo que perdieron,
ambos corren
tras haber caído,
mujer caída,
labio caído,
piernas caídas,
hablemos desde lejos,
pero hablemos.


Estornudemos
la salud de la risa,
esa sale más barata
y se vende más rápido,
a la gente le gusta comprar.


Solo me dan ganas
de desabrochar
ese momento,
para dártelo;
eso es todo.


Pongamos el antifaz,
aquí los nombres no resuenan.
Sin conocer brilla

Una vez más,
por el diminuto
paisaje de la cerradura;
se ve algo
de lo que yo
apenas quiero.


Suena el teléfono
y llama la llama;
aún es hora
de sorber hasta dentro,
y extirpar la última lagrima.


Lo decimos pero se olvida,
desde la ventana
diciendo adiós,
algún día se olvidará otra vez.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Vendedor ambulante a la fuga

Vendo postales de amor.
Caricia de la foto
que no calienta,
ojo en el café
que no fotografía,
parvada de coños
que no aterriza en cama firme,
lentes que enfocan el aire
que no atora,
radiografía de los labios
que no embalsaman,
mi rincón oscuro al
que no le echas el flash,
luz de ovarios
que no iluminan
el cristal polarizado del rehilete yo,
superficie de poste
que no patrocina la risotada en close-up,
televisión haciendo ojitos a la ciega
que no escucha comerciales del Cupido,
camionero de los nervios,
arrepentimiento y vuelta,
para variar, ese que no viste,
sudor quemado de las manos
que no tocas,
ojeras que dijeron whisky,
te aceptaron de patrocinadora y firmaste
que no,
piso recién trapeado
que no manchaste con tus huellas,
el borracho, trago gratis al oír tus ojos, y
que no poso,
hígados sin destilar en la pollería
que no compre,
la ventana rota
que no te regale por discreto,
el gallo cantando amor a madrugada llena
que no te desayunaste,
vendedor de tarjetas telefónicas
que no vende tus llamadas,
tiempo aire con diarrea
que no te alcanza,
el último cigarro con la marca del principio
que no te enciende,
código de barras y barrotes de tus nalgas
que no me sellas,
pantalla de plasma negro y con estrellas
que no te muestra,
todo este andar de ecos que no pudo decir no,
y ahora vende sus postales de amor.
Sección de espectáculos


¿Foco fundido
o falso contacto?
Todavía no lo sé.
Inauguro cuatro años de soledad,
y resulta que llegas a la presentación.
Después, sirvo el vino tinto
preparo los canapés
y resulta que no suena el timbre
de este nuevo centro,
donde no importa tanto que lleguen,
sino que se queden.
Entretengo a la prensa de las dudas
con cigarros y este vino
que se bebe solo;
pero tú nomás no llegas.
Saco el destripado pasaporte por las otras,
pero me quedo solo en la terminal,
no sabiendo ya
qué decir a la comitiva;
antes de que terminen por lincharme.
Respiro en la espalda
y ya siento como me mastican.
En fin; aprovechemos las circunstancias,
desempolvado el sudado documento,
inhalaré hasta reventar
el barniz de uñas
rojo color puta
que dejaste;
me voy de viaje, a lo mejor así,
ya no necesite dejar
encendida la luz por las noches
para poder dormir.

domingo, 28 de septiembre de 2008

Día de los buenos pretextos

En este momento
tengo el vacío más grande del mundo.

Tan grande
como el condón que su puso dios
para follarse al vacío
y no procrear la noche eterna.

Tengo tanta soledad
que atestigua cómo sigo vivo.

Hay pocas cosas,
recordando
cuando estaba con mejillas mordisco.

Acostado
sobre un montón
de ovarios disecados en el aire.

Sobre más y más recuerdos.

Exhibiendo mi oscuridad,
cobijando la densidad de mis abismos.

Dando a vasos llenos
una ofrenda a tus piernas.
Por( )no a besos


Keira Knightley, bésame como besan los desaparecidos.
No me enseñes a besar fantasmas,
y no es porque tus labios pesen menos;
no es aquello de que nazcas
y te vayas de día de libre antes de nacer.
No es que vayas al mercado
digas me da uno así y así,
la bufanda de tu cuerpo da el mismo calor
o hasta más que el mío;
qué es mío, sino un éxito
que puedes abortar, no es que sea
tu Adán y no haga música
y que me vaya de viaje,
no es, te lo juro;
una recomendación de la señora
que hace los quehaceres,
sobre cómo decorar mi cuarto ahora.
Casta, no, o como quieras;
para meter a Buda al horno
patrocinando esa pose
que tanto te gusta,
porque de repente se puso de moda en la red;
vasta para cerrar esa ventana, faltar a
con tus amigos a ahorcarse a un cibercafé.
Esto está de plástico, bésame,
como besabas a los catorce años
cuando todavía no podías hacerme
un estriptis de labios.
El malentendido mantenido


Abstengo,
corto camino
color que no se crea,
el resoplido, recuérdalo, a la esquina nunca se dice,
tiene que suceder; al cobijo le sale la barba.
La luz no es policía, esa linterna tampoco sabe qué decir.
Recorderbackpack, la nube que arrastra los pies,
blusas abiertas al desabotonado;
no me des cuerda,
no calientes si no vas a poner nada.
Que toquen a la puerta,
que cada entrada este rasurada de cerrarse.
El ligero del silencio
no tiene porque no calentar,
se desnuda sin defectos,
la hora en que me acerque ahí,
será la hora de cambiar cuerpos.

sábado, 27 de septiembre de 2008

Otra vez con lo mismo

Y tú que siempre te acordaste del cumpleaños del suicidio.
Tan desvestida como vestida el mundo de la moda.
No me llevo las llaves, las solas puertas se abrirán.
Respiro que es ronquido que es quejido,
apago las luces y pongo la alarma.
Yo que quiero dejar y el ya estuvo no sale.
Fumar sólo en aéreas reservadas, fumar.
Por esta caseta no pasa nadie ni nada.
Ir a ciertas horas al baño, para adelgazar a la amargura.
Dices que quieres, y quieres.
Cuando jubile a mis emociones;
en su tiempo libre ,se irán de vacaciones:
al oriente.
Harán yoga por salud
y para variarle y aprender un poco,
a esto de estar solo tanto tiempo.
Posmodernidad e Hipermodernidad en algunos poemarios: Aullido de Cisne de Mario Santiago Papasquiaro, Cantar del Marrakech de Juan Carlos bautista y Traducción a Lengua Extraña de Luis Jorge boone; desde un análisis semiótico




Estos tres libros han sido tropiezo y levantamiento en la poesía mexicana; fin de una época e inicio de otra. Aparecidos en el transcurso de un corto período de tiempo, construyen y contribuyen a construir la historia de las letras mexicanas en cuanto a poesía se trata. Aullido de Cisne de M.S. P. es un poemario escrito entre 1979 y 1992, publicado en 1996[1]. En el 2008 apareció la antología Jeta de Santo que reúne poesía de los años 1974-1997, donde aparecen algunos poemas de Aullido de Cisne. Dicho texto fue publicado por el Fondo de Cultura Económica España.[2]Cantar del Marrakech; de J.C.B. publicado en 1993 en el Fondo Editorial Tierra Adentro, del CONACULTA. Traducción a lengua extraña, de L.J.B., obra que mereció el Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2007. Publicado en el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, a través del Programa Cultura Tierra Adentro.[3]

En cuanto a trabajos de investigación en torno al primer libro, nada se ha dicho; del segundo tampoco y del tercero menos.

Hablamos de períodos cortos, de instantes rápidos. ¿Qué sucede? ¿Por qué está precocidad? Aproximadamente cuarenta años de gestación hablan desde la palabra poética, ¿Cómo estudiarlo? ¿Es realmente necesario para la comprensión del fenómeno-literario-poético? ¿Qué sigue ahora? ¿Existen correlaciones con el estado actual de la cultura? Estas dudas iníciales son las que nos encaminan a llegar a la orilla y desbordarnos: enfrentarse al hecho literario. A la hora de hablar de análisis serios el crítico sale por un café, se entretiene un rato pensándolo, y decide que mejor no; mejor sólo una reseña. ¿Por qué? ¿Miedo? ¿Inseguridad? Conductas de la nueva era, también se ven presentes en el ámbito académico; eso, y la rápida y continua aparición de obras, dejan en un estado de anonadación al crítico. Se dice poco, casi nada sobre el acontecer, cayendo continuamente en un facilismo exorbitante donde en última instancia se tomó muy poco al objeto de estudio en cuestión. ¿Por qué ignorar a todo una generación de poetas? ¿Televisión y poesía? ¿Un cambio de conciencia tan radical? Dentro de todo esto, dónde quedo la poesía; ¿Hay poesía en la actualidad? Poesía, poesía, poesía; es la poesía misma la que da pies con que caminar a este análisis.

Pongámonos los guantes para disecar: objetividad. Como finalidad, profundizar y ampliar el espectro en torno a las problemáticas antes mencionadas; reiterar la importancia del conjunto de obras en cuestión, dándoles un lugar dentro del canón de la Literatura Mexicana. Introducir la noción de hipermodernidad en el campo de estudio de la poética mexicana; aunque no sea fácil hablar de lo “hiper”, ya que apenas es algo dado, y que sigue todavía evolucionando; es más fácil acomodarse al concepto de “pos”, pero dicho concepto entendido como:

“Una ruptura fundamental en la historia del individualismo moderno, dando lugar a la manifestación de deseos personales, la realización individual, la autoestima; ya no es suficiente. Una etapa que nace alrededor de 1950, una sociedad cada vez más volcada hacia el presente y las novedades que trae, cada vez más regida por una lógica de seducción pensada bajo la forma de una hedonización de la vida accesible a todas las capas sociales. Gusto por las novedades, la promoción de lo superfluo y lo frívolo.”

Pero, como el mismo autor lo hace notar: “¿Estamos sometidos, desde los años ochenta al mismo modelo narcista? Algunos indicios permiten pensar que hemos entrado en la era de lo “hiper”, caracterizada por el hiperconsumo, la hipermodernidad, continuación de la posmodernidad, y el hipernarcismo.” Este nuevo modelo de conducta, como lo dice, permea todas las capas sociales; incluso las del arte, en este caso, la poesía. La poesía privilegia los espacios privados, las relaciones humanas, el indivualismo; es por ello que creemos pertinente abordar las obras desde esta perspectiva. ¿Cómo lo haremos? Localizaremos los signos que caracterizan a cada época en algunos de los poemas que conforman los poemarios, para poder juzgarlos más críticamente y no limitarnos a una mera evaluación subjetiva, que no olvidará que todo análisis requiere de cierta subjetividad; a la hora de hablar de su ubicación. Es aquí donde la semiótica entra en juego. Una vez hecho esto, nos auxiliaremos de las funciones referenciales de R. Jackobson para realizar el análisis lírico de los poemas. Como decíamos al principio, fin de una época e inicio de otra; pero no se puede hablar de una nueva era sin ver qué es lo que queda de la otra, y a su vez, qué hay de nuevo. No se pretende profundizar más sobre esta cuestión filosófica, sino más bien introducirla en el análisis literario, ayudando así a la comprensión del fenómeno literario.

¿No era ya de por sí conflictivo hablar de “pos” como para ahora hablar de “hiper”?
[1] Nomedites, Infrarrealismo, audiorevistas, México, 2007. www.nomedites.com
[2] www.wikipedia.com
[3] Boone, Luis Jorge, Traducción a lengua extraña, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, México, 2007.
Este sexshop no admite girasoles


El gesto,
no;
ya
no
caigo tan fácil,
no
compro, gracias.


El abandono
está acostado
y tiene miedo,
ebullición,
luz,
goce, estos
colores se gastan
y todo se queda en nada.


De eso sí,
habrá que ir
con el doctor para que
le receten algoaestegrito.


Imaginen todo,
al cabo aquí
sí se puede,
hablen por teléfono
a París;
a lo mejor el amor
tiene tiempo
y está desocupado y los atiende.


Regrésale tantito,
ahí en esa escena
donde se
acarician.


De repente es el mareo
de la nube y también del dolor.


Un amor rápido es un amor rápido,
no hay tiempo para el amor.


Pónganle calcetines
de responsabilidad
a esta mañana,
hoy otra vez
vanallovervidrios.


Jaléenle el cabello
a la visión,
verán
como si responde
aunque ya esté cansada,
ahorita
se
mete,
se da un baño,
dos horas
arreglándose,
se toma un café,
un cigarro y quién sabe;
a lo mejor al ratito
hastaunchurrito.


Pero no, este sensibilidad
que se peina en su webcam
mañana tiene que elaborar gritos nuevos.


Para esas horas
ya habrá alguien que
esté haciendo el amor.
Y después, también se
tendrá que ir al trabajo.
Todo va girando en la boîte feliz

Un perverso ha violado los cerrojos”
Enrique González Martínez



Pandora abre la caja feliz:
Al final no importa si duermes o no, todo es saber si sueñas o no.
Todo un tugurio de sensaciones es este cuadro.
Algo así como que te levantes y me eructes un beso.
Aquí estoy esperando como un día apagado.
Los recuerdos no se pudren, no se echan a perder;
no los metas al refrigerador.
Esto ya pasa seguido, cuando no vienes.
Tan poquitas palabras y mira como duelen.
Nadie habré la ventana, no abrir los ojos, me asfixio.
Ya aprendí la lección, ya sé
que nadie quiere escuchar que estoy solo.
Todo va girando. Dicen que tiene que cambiar.
El Abuelo Rimbaud ya lo dijo,
uno tiene que ser visionario. No importa cómo.
Afortunada (o desafortunadamente) mente,
aquí todos se quedan dormidos.
Alguien tiene que jugar a que no sale el sol.
Dios no e ají; Dios no llora y eyacula.
Alguna vez Dios sí eyaculo dentro.
Esto apenas se ve, pero se ve.
Aunque el foco tenga tanta luz, también se apaga.
Cuando Dios se excita, crea la luz.
Él a ella:
Recuerda que estoy ciego.
Recuerda que las puertas no siempre rechinan.
Esto ya lo vive, uno también se muere de decir eso.
Cuántos cigarros más
se podrán fumar cuando diga,
sus últimas palabras. Y despierte.
El humor comienza ahogarse,
es momento de que comience a llover.
No es la lluvia; es Lluvia, no seas maleducado, dices.
Enciendan la música, esa no te envejece.
Dios come a sus horas. Alguien se tiene que sacrificar, y morir.
Mírala dormir, a lo mejor así no se apaga.
El cielo comienza a cerrarse;
es momento de vestirse y otra vez morir.
La sangre, dices, también llora nieve.
A nadie le sobra, pero sí puedo darte vida.
Estamos de acuerdo, de este lado el sol tampoco sale.
Nadie te da alas pero como te las cortan.
Este es ese mejor momento,
no enciendas la luz.
Siempre estamos a tiempo.
Esto de hablar a solas
dando vueltas en mi cuarto
se está haciendo costumbre.
Sección de espectáculos


¿Foco fundido
o falso contacto?
Todavía no lo sé.
Inauguro cuatro años de soledad,
y resulta que llegas a la presentación.
Después, sirvo el vino tinto
preparo los canapés
y resulta que no suena el timbre
de este nuevo centro,
donde no importa tanto que lleguen,
sino que se queden.
Entretengo a la prensa de las dudas
con cigarros y este vino
que se bebe solo;
pero tú nomás no llegas.
Saco el destripado pasaporte por las otras,
pero me quedo solo en la terminal,
no sabiendo ya
qué decir a la comitiva;
antes de que terminen por lincharme.
Respiro en la espalda
y ya siento como me mastican.
En fin; aprovechemos las circunstancias,
desempolvado el sudado documento,
inhalaré hasta reventar
el barniz de uñas
rojo color puta
que dejaste;
me voy de viaje, a lo mejor así,
ya no necesite dejar
encendida la luz por las noches
para poder dormir.

Llegada al vacío?

El reloj avanza, y Cien años de de soledad es aún una obra impúber. Eso no impide que todos hayan hablado sobre ella, bueno, casi todos, excepto yo. Qué me queda de algunos días de mi vida, algunos cigarros, una que otra taza de café, risas y peleas: un sí me gusto pero no me gusto. A diferencia de críticos, analistas y más de algún compañero, sí fue mi primer encuentro con los (ya casi) Cien años de (éxito) soledad de Gabriel García Márquez. ¿Un sabor agridulce?, no lo niego; más dulce que agrio, más agrio que dulce. Acostado, solo o en la casa de mis padres, con insomnio. Pero dejémonos de datos autobiográficos del proceso real de mi lectura, vayamos al misticismo. Hagamos realismo mágico: si este se entiende como un equilibrio entre realidad (↓) y fantasía (↑), mi comentario es realismo mágico; en el sentido de los gustos y disgustos de la obra. El gusto es fantasía, el disgusto realidad. Concibo esto a pesar de que nunca he estado de acuerdo con el término realismo mágico; en lo personal la Literatura siempre me había parecido realidad mágica por sus correlaciones que lleva con la realidad misma y el sentido de ficción que conlleva. Me quedo con mi primera visión entre la espada y la pared, que no significa que no conozca el otro realismo mágico, es bueno expandir el horizonte cultural. No me parece que se habla de la enésima novedad decisiva con este término que para nada es nuevo. En fin; comencemos con el realismo mágico de una visión:
(↑) Una cosa es como imaginaba yo este realismo mágico y como lo imaginó el autor. He de ser sincero, el encuentro con este enfoque de ficción fue una total y agradable sorpresa.
(↓) El canon y la crítica literaria ubican a Márquez y su obra como parte fundamental en la continua evolución de la Literatura Iberoamericana, lo que me lleva a una profunda decepción. Hombres, épocas distintas, estilos distintos, obras distintas, sí. Pero si el canon nos dice: este es el fruto de tantos años de buenas obras como El Aleph de Borges, Rayuela o cualquier recopilación de cuentos de Cortázar, El reino de este mundo de Alejo Carpentier; aquí apenas si llega una muy suave brisa a diferencia del temblor que causó la lectura de estas obras. Es cierto que Marquéz lleva el mito, la ficción y los límites de la realidad al margen, a la otra orilla, a la punta del vacio; pero es este método que comúnmente se llama salirse por la tangente en el orden de la secuencia narrativa la que lleva al hastío. Se me puede acusar de inexperiencia, de primerizo, pero como ha ido pasando el tiempo después de la lectura y he ido profundizando en la narrativa del autor; la decepción es cada vez mayor. Pongamos por ejemplo: Memoria de mis putas tristes, un relato que entretiene y mata el tiempo, eso es todo, un asesinato. La espiral va hacia abajo. En lugar de ser la cima de Literatura, sólo es la punta del iceberg, una punta que apenas, apenas denota el contenido.
(↑)Cien años de soledad se publica en 1967; tres años antes, Rayuela; dieciocho antes El reino de este mundo, Hombres de maíz y el Aleph; cinco años antes La muerte de Artemio Cruz; doce años antes Pedro Paramo; diecisiete años antes La vida breve; un año antes La casa verde. Todo un mundo de Realismo mágico, todo un mundo nuevo en el nuevo mundo. Tras verse sofocado durante años por la sombra de ser llamada una mala copia de la Literatura europea, en América surgen obras totalmente nuevas. Cien años de soledad no es ni cima ni punto intermedio, es una parte del todo.
(↓) La exacerbada presunción de Márquez al quererse erigir como obra de ruptura absoluta (que no lo es). No niego que es bueno pero es él el que niega estar adscrito dentro de un marco regional, estético y cultural; aunque en repetidas conferencias ha dicho lo contrario en otras ha dicho lo contrario de lo contrario, además de en algunos textos. Quizás esto se deba más a la crítica que al autor, pero el autor ni quita ni da. Postrarse como el todo y poner en menos a los demás. Si se anuncia una nueva era del arte, del saber y de la cultura, se trata de determinar qué es lo queda del ciclo y lo que hay en el mismo ciclo. Por qué negar la continuidad que lo liga al pasado y quererse instituir como una obra absolutamente nueva cuando indudablemente hay una referencia al pasado y al presente. En fechas recientes la nueva edición contiene artículos de sus compatriotas, pero eso no quita lo dicho.
(↑) La incursión dentro de la obra de estructuras narrativas de hace mucho tiempo, como la de nombrar a sus personajes al estilo de de Homero. La frase adjetival después del nombre y entre comas, a la hora de nombrar al personaje que asciende al cielo, Remedios, la bella.
(↓) La falta de respeto hacia la inteligencia del lector. Un lector no avisado se ahoga en la ironía del narrador. Es cierto, el juego con los nombres que tiende a desconcertar al lector es parte fundamental del universo discursivo de la obra, pero esta reticencia resulta agotadora. En ediciones más recientes existe el árbol genealógico de la familia Buendía, pero eso no significa que al enfrentarse a la lectura la dificultad disminuya. Dónde queda la cultura de construir el gusto por la lectura de la que tanto se habla, que es fundamental en la Literatura cuando se ofende al lector. Una de las características de la Literatura es ser una lectura de placer. Se necesita de mucha paciencia y autodisciplina, pero sobre todo soportar la burla que queda en el ir de la lectura por parte del narrador (se ríe de mí, ¡se ríe de mí!). Si de por sí no hay lectores, menos así. Es cierto; esto también responda a la ubicación geográfica y regional donde se encuentre el lector y de su horizonte cultural.
(↑) La estilización tipificada de los personajes y la inserción de diferentes formas en que narra el autor: imitación de distintos discursos. Además de las múltiples perspectivas narrativas: la evolución de la historia; lo que hace una muy buena novela polifónica, aunque no se evidencie del todo. Cada personaje responde a distintos atributos, está codificado para responder correctamente a la estructura circular de la novela: el espíritu de lucha y perseverancia de Úrsula, Aureliano con sus premoniciones, José Arcadio Buendía y sus ideales de respeto y aventura. Sí se disfruta.
(↓) Sin duda la alteración de las secuencias narrativas fue el hecho literario más notable y reconocible y alabado dentro de los postulados del boom. En la obra las continuas prolepsis y analepsis le dan un sabor especial de suspenso a la novela, las uñas no alcanzan. Pero es como todo, todo exceso es malo. El repetir, el repetir, indica una indigestión. Un malestar que no siempre es culpa de los tacos de la cena, sino que más bien de una estilística gastada.
(↑) De las primeras novelas que utilizan el efecto de las drogas como un recurso estilístico. Cuando los habitantes de Macondo no pueden dormir y están en vigilia; los recuerdos se borran, la memoria a corto plazo es una laguna en el vacío, pierden la noción de las cosas y de la realidad, la identidad, la conciencia; se hunden en una idiotez sin pasado. ¿A qué nos remite esto? ¿Suena familiar? (Aparte de pensar en los Beat) A los efectos de un consumo excesivo de drogas.
(↓) ¿A qué atribuirlo? A una falta de ingenio en el autor o a un simple capricho. Constantemente aparecerán las mismas frases, tal cual; en el episodio narrativo y luego en el siguiente, en el siguiente, etc. ¿O esto también es estructura del boom? Hasta donde sé, no. “El aire de la habitación comenzaba a convertirse en lodo”.
(↑) Código es el conjunto de reglas que regulan sistema. En la obra encontramos constantes cambios de código, una total expansión del espectro sememico convirtiéndolo en goce estético. P. ej.: cuando Pilar Ternera lee el pasado en las cartas en lugar de leer el futuro.
(↓) A pesar de la imparcialidad del narrador al ser omnisciente según su conocimiento de la historia y heterodiegético en lo que se refiere a la participación del narrador; se alcanza a notar cierta postura del autor respecto del hecho histórico narrado, una preferencia por la izquierda; lo que va en detrimento de la obra. Quizás la estructura en un principio respondía a la de Alejo Carpentier con sus semejanzas con la novela histórica, pero termina perdiéndose un yoismo de esto es lo que creo yo (yoyoyoyo).
(↑) En contraposición a la ofensa hacia al lector, el narrador siempre está haciendo síntesis de los hechos narrados.
(↓) En contraposición a la síntesis, el lector atento se desespera y hastía.
(↑) La riqueza del lenguaje dentro de la obra: los argots son tan variados como los personajes mismos.
(↓) Como ya sea dicho desde de esta postura: el extremismo solo conduce al vacío. La desesperanza en los personajes, el sentido trágico de la vida, la soledad aplastante; comienzan como buenos recursos para después convertirse en límites que ya no transgreden las expectativas sino los límites de la paciencia.
(↑) La vigencia de la obra. En el sentido más amplio de la concepción: la entrada del hecho literario en la cotidianidad a través del hecho televisivo. En la serie Los Simpson se alude constantemente a la obra en cuestión, baste un ejemplo: la fundación del pueblo que habitan los Simpson responde a la fundación de Macondo. Jeremias Springfield, fundador, quiere hacer un pueblo de paz y armonía; mientras que unos seguidores van con él, otros rechazan su propuesta y se van con Jeremias Sherviville, cuya única finalidad es fundar un pueblo donde se pueda tener relaciones libremente con sus primas sin represiones sociales, este placer solo tiende a perder a sus hijos y ser enemigos de los personajes principales, Los simpson. ¿Suena?
(↓) El remix de la trama. Aparece varias veces, los familiares haciendo lo mismo que los anteriores, característica propiamente humana. Es una construcción circular, cierto; lleva implícito un cuestionamiento de manera deliberada en el texto, mezcla de la realidad narrativa con elementos fantásticos y fabulosos; pero, ¿eso significa que me tenga que gustar?
(↑) Casi como una reacción en contra del existencialismo, el absurdo y la crueldad imperante en Europa. Allá la revolución en la Literatura que llegaba a los extremos de una critica severa del valor de la vida misma. Jean Genet decía que el problema es la cortesía con el lector, él casi casi calló en un cubismo. Por el contrario el juego de Márquez es menos ofensivo y con un sentido más familiar, muy humorístico, algo lúdico para recreación del lector. Hoy día 100 años entra más a los hogares que Nuestra Señora de las flores o La puta respetuosa.
(↓) La entrada de estas doctrinas literarias-filosóficas en el realismo mágico de la obra entendido como movimiento estético literario. Hay un repetido uso de la ironía entorno a los temas que funcionan como códigos que a su vez articulan la novela: el erotismo pero sobre todo la soledad. La ironía funciona como patrón conductor del erotismo y la soledad llevándolos al vacío. El vacío es un postulado esencial en las estéticas mencionadas; en el existencialismo y el absurdo hay vacío, este vacío en la obra lleva a la crueldad. ¿Es esto 100 años? ¿Gabriel no leyó el postulado de que la realidad americana es por si misma mágica? ¿No entendió la complejidad del arte narrativo de Borges y Cortázar de que no sólo se trata de copias filosóficas y visiones del viejo mundo en el nuevo mundo? ¿O es sólo el vacío de Márquez siendo Márquez?
(↑) Bajtin dice que el dialogismo resulta de las relaciones posibles entre enunciados, o entre posiciones ajenas y voces ajenas dentro de un mismo enunciado. Dentro de las tres distinciones que hace de dialogismo, la tercera nos dice que existe cuando un discurso revela influencias de discursos ajenos. Encontramos pues, dialogismo en la obra con la Biblia (evolución Macondo-génesis) (destrucción macondo –apocalipsis) (Asunción de la bella-Virgen María) (Éxodo-travesía de José Acadio) (el diluvio); El Quijote (La elefanta y Aureliano Segundo-bodas de Camacho); La muerte de Artemio Cruz (mención directa del personaje, lo que nos lleva a intertextualidad, y relación con el argumento narrativo en lo que se refiere a revolución); Pinocho (mención dentro del relato de la historia de Jonas y la ballena).
(↓) No soportar el peso de la autobiografía. Es cierto que todo esto empezó por una recreación de la infancia de Márquez, pero, ¿no se podía quedar así? ¿Hacia falta evidenciar el acto creador? Como que con esto el autor nos dice que no cree en lo que dice y que en realidad prefiere la realidad y no el R.M.; o para qué decir: “Aquella caminadera de las cosas era más desesperante que sentarse a escribir”.
(↑) El trabajo cuidadoso con los diálogos, casi una obra arquitectónica o un busto o una estatua. Márquez trabaja con materia bruta, con el habla coloquial logrando diálogos bellísimos de acuerdo al contexto y momento narrativo.
(↓) El autor no ha leído a Wilde cuando decía que el arte no sirve para nada. Es cierto que en un principio sus inclinaciones políticas estaban bien justificadas, pero hoy como diría Tomashevski, es sólo una máscara. Fuera de la obra, sí; con un dato biográfico en desacuerdo.
(↑) El juego que se hace en la obra con la inconsistencia política; demostrando la tesis de que la política es un vaivén que un día duerme del lado derecho de la cama y al día siguiente del lado izquierdo. Entiéndase que se hace este juego sin importan la preponderancia por la que se inclina el narrador.
Así llegamos al final. Entre subidas y bajadas, entre realidad y sueño. Márquez es Márquez y Cien años de soledad es Cien años de soledad. Conocí Cien años de forma directa y al autor de forma indirecta. Lo que se ha dicho es lo que me queda tras la lectura de ambos. Existen diferentes campos visuales, se puede estar o no estar de acuerdo con lo que digo, pero esta es mi interpretación de ese texto. Mi realidad(↓) puede convertirse en fantasía(↑) y mi fantasía(↑) en realidad(↓); pero yo prefiero que lo positivo siga siendo positivo y lo negativo siga siendo negativo; si alguien quiere hacer un cambio de código con mi estructura puede hacerlo, pero sólo será un espiral porque si lo negativo se hace positivo lo positivo se hace negativo. Mi dicotomía se parece a la obra del Gaby, critica pero hace lo mismo. El realismo mágico es indudable, pero la versión de ese realismo es como mi lectura: sí me gusto pero no me gusto. Después de nombramientos, conmemoraciones, premios; aún dudo si el proceso de maduración de 100 años de soledad le permitirá la entrada futura y definitiva a la Literatura. Entre tantos gritos y voces que se hacen sobre el autor, esperaba escuchar su voz. Es un punto de vista, pero después de todo hay obras que dejan de ser Literatura y obras que no son Literatura terminan siendo Literatura. Bueno, lo acepto, aunque duela, los juicios de valor no siempre importan.
te declaramos Nuestro odio grito, ya No gritas taN fuerte
“El terrorismo es una pornografía de la violencia.”
Gilles Lipovetsky
Les temps hypermodernes

Amanecí desvelado, pero otros ni siquiera amanecieron. Ayer, quedo demostrada la ineficacia de los últimos operativos ejercidos sobre el estado michoacana. Ya deberíamos saberlo, el fuego sólo trae más fuego. Pero háganlos entender, prefieren el espectáculo y el aquí no pasa nada. La justicia local prefiere los dulces placeres de la extorsión, el abuso y la prepotencia; antes que hacer lo único que tienen que hacer: vigilar por el bienestar público. ¿Y qué hace el gobierno? Antes de que una reforma e el campo policial, ates que aumentar el sueldo, implementar hasta cierto punto, cursos de sensibilización a estos hijos del hielo; les da más armas. Toma mijito, otro pomo pá que te sigas poniendo pedo. “¿Por qué ensañarse contra Morelia?”[1] Eso es algo muy fácil. Se habla de informes anteriores, llamadas. Bueno, así de simple: si uno sabe que le van a poner sus putazos, lo primero que hace es cubrirse la cara; es extraño que el gobierno no reaccionará así. O es de plano muy, descuidado; o es de los que dicen que dicen: total, qué tanto es otro. Ni se intensifico la vigilancia, ni se alerto a la población; por el contrario, varios días antes se colocaba al artífice hiper: luces, sonidos y colores. El monstruo de malvavisco se los come; parece que estos hijos del marketing no vieron cazafantasmas, o ya de perdis el remix de los Simpson. Cuestiones de lógica básica.
“Hay que tener confianza en las autoridades estatales y municipales y que cada autoridad haga su función”[2]. Sí de que tenemos fe la tenemos; cuando uno sale de su casa, aunque no sea muy noche, se asegura de no llevar nada: ni celular, ni ipod, ni dinero. No sea que a algún chistosito, vestido con ese uniforme que le queda grande; venga ahora armado hasta a los dientes a decirte que le caigas con lo que traes, que lo hace por tu seguridad. Amén señor; hoy llegue con bien a casa.
¿Una gran perdida para el pueblo michoacano? Narciso responsable no es de por aquí ni es de allá, pero después de mirar un rato la tele, estaba en su cama durmiendo tranquilo. ¿Quienes son los caídos? Jóvenes en busca del placer y viejos en busca de su pasado; Narciso se duerme temprano por salud mientras se fuma un cigarro; y piensa que todo este tiempo ensayando, para que al final la ropa no se usará en el desfile.Las cosas se ponen duras, y los más desprotegidos lo hacen si condón. En este putero a ese servicio sólo tienen derecho: los de uno y otro lado de la barra, los que están allá al fondo en la mesa del rincón, los de más y más abajo, que se chinguen. Pero lo peor no es eso, nadie hace nada por educar a este chamaquito que va por primera vez; parece que a todos los que reclaman más higiene y papel en los sanitarios, se les olvida que solos no van a hacer nada. Por mientras, queda la duda de si no fue algo desde dentro, planeado desde el principio, una treta más para infundir, valga que valga; más miedo en la población. Lavarse las manos, culpar a los otros y meter, ya encarrerados, más sabrosamente la mano; ¿por qué algunos ya sabían y decían que no fuéramos? ¿Por qué la insistencia de la televisión y los periódicos en poner a los políticos, empresarios y la iglesia como si de verdad no supieran nada? ¿Estrategias de mercado? ¿Iluminemos Morelia?
¿Qué es lo peor, lo peor de todo? Lo más seguro es que no habrá fiesta el 30 de septiembre, qué tragedia; no voy a poder dormir. Y Narcizo, no te busques en la lista de desaparecidos, recuerda que la curiosidad mato al gato que se baña con su propia saliva.

Bostezantemente: 1 flor de narciso recién rasurada

Morelia, Michoacán 16 de Septiembre de 2008
[1] http://www.cambiodemichoacan.com.mx/vernota.php?id=86202
[2] Ibid.

Aquí vs mi pedazo al todo

Explicación sobre las hojas

Nunca tuve que desalojar,
pero ahora el sótano me enreda telarañas,
creo que sólo estaré aquí cierto tiempo,
huyo de inmediato a la balanza de lo desconocido.
Lloriqueo el alegre silencio de lo inimaginable,
gimo el amontonamiento del resbaloso desastre,
escenas tímidas del porvenir olisqueado por el premuroso fin,
fumo y canto el radiante desastre inagotable,
ese deseo va a ser un aliento pensado cada noche.
Ahora el gran tropiezo se teje en la temerosa intimidad,
Perdido estoy en paranoia, éxtasis, sensación y perversión del posible.
Estas hojillas son por eso, por el espacio en blanco del futuro aún no previsible que ya duele.